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Mostrando entradas de junio 6, 2010

Muriel de la Fuente: ermita de la Virgen del Valle

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R esulta más que probable que muchos de los cuerpos que se extrajeron del cementerio medieval que se localiza en una de las laderas sobre las que se asienta esta pequeña ermita rural, que aún conserva algunos rasgos de sus orígenes románicos, pertenecieran a peregrinos que, procedentes de la capital de la provincia, siguieran esta ruta, que se encuadra dentro del denominado Camino Soriano de Santiago o Camino Castellano-Aragonés, siendo el cercano pueblo de Calatañazor uno de los destinos principales. S ituada a apenas una distancia de 5 kilómetros de Calatañazor, y perteneciente al término municipal de Muriel de la Fuente, esta pequeña ermita se ubica fuera del pueblo, pero, no obstante, al comienzo del sendero o camino que lleva directamente a uno de los lugares más hermosos y fascinantes de la provincia: el nacimiento del río Abión; o, lo que viene a ser lo mismo, aunque popularmente hablando: el Ojo de la Fuentona. D e la Fuentona, su extraordinaria composición y su magia sin igual

Abioncillo

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R esulta más que probable, que su nombre haga referencia a aquél lejano génesis y a una pequeña comunidad rural asentada en las cercanías del río Abión, a medio camino de distancia, aproximadamente, de Calatañazor y Muriel de la Fuente. Una comunidad que, desde luego, continúa siendo pequeña en la actualidad, pero que mantiene hasta cierto punto su independencia o seña de identidad arquitectónica, siquiera sea en la forma y estructura de sus típicas casas serranas. Es este un dato significativo, si consideramos que ésta seña de identidad se está perdiendo progresivamente en los pueblos, saturados de construcciones híbridas que, en su aparente modernidad, restan, por lo general, atractivo y encanto a lo tradicional. I gnoro si la parroquia nació bajos auspicios románicos, pues la zona produjo, en tiempos, una excelente cosecha de ese arte que algunos autores definen como el arte de la peregrinación . Si así fue, todo vestigio, desde luego, se ha perdido, como se perdieron todas aquellas