La vieja gloria de Arcos de Jalón
No todo se basa en su románico de calidad; ni en sus espacios naturales de soberbia belleza, como la Laguna Negra, el entorno de los Picos de Urbión o el Parque Natural del Cañón del Río Lobos; tampoco en sus singulares fiestas tradicionales y sus romerías. Ni siquiera en la variedad micológica de su tierra, que hace las delicias, a día de la fecha, de micólogos y aficionados, que rastrean sus valles y pinares en busca de tan codiciado tesoro. Soria, provincia de contrastes que nunca deja de sorprenderme, es también heredera y depositaria de viejas glorias -y no me refiero a Tiermes, Numancia o Uxama- que incitan a mirar hacia atrás, con un sentimiento de inconfundible nostalgia.
Allí, aparcada a un lado del apeadero, la vieja locomotora numerada con el número 'dos mil doscientos sesenta y tres' sueña, desde su merecida jubilación, con el humo ennegrecido que salía de su chimenea y el silbido provocado por el vapor en ebullición que se acumulaba en sus calderas.
Seguramente, haya todavía gente que la recuerde -posiblemente con el carnet de pensionista y jubilada como ella- y sea capaz de contar historias; muchas historias, tantas como aquéllas que la imaginación convino en denominar 'Las mil y una noches', que tanto interés despertaron en el pérfido sultán.
Porque, hablando de historias, ¿cuántas no podría contar ésta vieja gloria, si en lugar de ser un objeto inanimado, la naturaleza la hubiera dotado con el don de hablar?.
- ¿Historias? -podría decir-. Claro que tengo historias que contar. Muchas historias. Me acuerdo de la alegría de los quintos cuando los acogía en los vagones que arrastraba, medio borrachos, camino de Zaragoza o de Barcelona o de Madrid. Y del labrador, despidiéndose de su novia en la estación, soñando con cambiar su destino en la capital. Y también me acuerdo del revisor, aquél viejo gruñon, pero noble, al que no se le escapaba nunca ni un viajero. Del calor que las calderas de mis entrañas proporcionaban a los maquinistas en las gélidas noches de invierno, cuando caía la nieve, y los copos se colaban en el interior de la cabina...¿Historias?. ¡Ay, memoria!. Si yo pudiera hablar...¡Cuántas historias no podría contar!...
Publicado en Steemit, el día 5 de febrero de 2018: https://steemit.com/spanish/@juancar347/la-vieja-gloria-de-arcos-de-jalon
Comentarios
Vaya recuerdos, a ver si coincidimos un dia y podemos ir a Langa, que la estacion la tiene alquilada un amigo mio y seguro que te gustara.
Jose Maria
(casi todos los fines de semana suelen estar por alli) tu me lo comentas y ellos encantados de enseñarte la estacion y todo lo que hay alrrededor, Almacenes, depositos de agua etc.
Tambien si algun dia tienes interes y coincides con Alvaro en Soria puedes ir a ver su casa/palacio que esta en la calle Aduana Vieja y que es del Siglo XII y la segun tengo entendido lamas antigua de Soria (ellos son San Clemente que sabes es uno de los doce linajes del escudo de Soria) Y esta casa es de los San Clemente, puesto que los Marichalar no tienen nada que ver con Soria son Navarros, los que tienen que ver con Soria son los San Clemente que ellos tienen tambien de apellido pero no se en que orden. De ahi tambien les viene la finca que va desde Soria hasta Numancia y tambien el cerro de Numancia que su bisabuelo lo dono al estado cuando aparecieron las ruinas de Numancia.
Yo la verdad es que estos cosas de nobles y demas no me hacen mucha gracia, pero esta gente cuando las tratas son realmente magnificias y da gusta tratar con ellos.
Saludos/Jose Maria