Peroniel del Campo: un universo rural por descubrir

Tal vez alguien piense que aplicar la palabra universo a un entorno rural y pequeño, sea una exageración; una licencia poética que tiende a magnificar algo que, visto desde esa cómoda, segura distancia que ofrece la carretera general que se dirige, en teoría, hacia destinos más opulentos y marketinizados, como Calatayud; lugares que también existen, aunque con fama de olvidados, como Teruel, y menciona de paso a Almenar -que permanece en las mentes de muchos por el recuerdo de su fabuloso castillo, uno de los mejor conservados de la provincia, donde nació Leonor, primera esposa de Antonio Machado, aunque también es cierto que muchos olvidan el Santuario de la Virgen de la Llana, al que acudían peregrinos en su camino hacia Compostela, como veremos más adelante- tienda a confundir al viajero desprevenido, haciéndole ver un simple pueblecito más, de los muchos que asentados en esta zona, apuntan hacia la magia del Moncayo, y por defecto, hacia Aragón.
Nada más lejos de la realidad. Y hablando de realidades, creo que no resulta una irrealidad, o una inconveniencia, aplicar la palabra universo para describir las particularidades de un pueblo que, aunque ha ido perdiendo vecinos a lo largo de los años, cuenta -en su balance de haberes, si queremos aplicar algo tan de moda actualmente, como son las estadísticas- con una historia que se pierde en la noche de los tiempos; con unos recuerdos que se remontan a aquél incierto periodo en el que la Orden del Temple dejó su huella, hasta el punto de que algunos historiadores sitúan en las cercanías de Peroniel, el emplazamiento real del escurridizo convento de San Juan de Otero; con leyendas formidables y milagreras, como la del cautivo de Peroniel y la Virgen de la Llana, siendo una de las pocas en las que todavía se conserva el objeto del milagro -el arcón y las cadenas en que este vecino fue teletransportado desde su cautivero en Argel-, hasta el punto de hacer del Santuario de la Virgen en Almenar, lugar de consiguiente peregrinación, como he dicho; leyendas románticas, a la vez que dramáticas, como la de los amantes de Peroniel, aunque también se refieren a ella como la leyenda de los amantes de Carramonte, la base de cuya cruz de piedra todavía puede verse a algunos metros hacia las afueras del pueblo; las misteriosas ruinas del cerro de San Juan; las ruinas del también desaparecido pueblo de Ándaba, del que, en realidad, se supone que procede la imagen gótica de la Virgen de la Llana que, según se cuenta, 'fue llevada al lugar hacia el que miraba'; la casa del cautivo, que aún se mantiene en pie, recientemente comprada y cuya fachada es fácilmente reconocible, por la colorida pintura aplicada en sus paredes; la fabulosa presencia, en tiempos, de la que en Pintura, se conoce como Escuela Castellana que, entre otras, mantiene en el Museo Numantino de Soria, una tabla pintada de insuperable belleza, del siglo XVI, que representa un Calvario...

En fin, un pequeño universo de Historia, Leyendas, Misterios, Anécdotas y Arte que iremos desglosando en las próximas entradas.

Desde luego, nada de esto hubiera sido posible sin el extraordinario ofrecimiento de Loli; la amable disposición de José Manuel (sin cuya inestimable ayuda, hubiera estado más perdido que una cabra en un garaje, como se suele decir); la aportación de Tomás, así como también la amabilidad de Don Julián Ortega, el actual párroco, a quien tuve ocasión de conocer en mayo del año pasado, cuando actuaba de párroco en la iglesia de San Juan Bautista de Ucero, así como en Barceval y otros pueblos de alrededor.

A todos ellos, mi más sincero agradecimiento.

Comentarios

KALMA ha dicho que…
Hola Juan Carlos: Un sitio por descubrir, como tú dices "un universo de historia", con pocas voces, pero hablan las piedras. Un abrazo.
Syr ha dicho que…
Creo que en mi recuerdo, lo que más impresionado quedó es ese altozano de trigales y barbechos ( me recordaba a Perdices), y la sillería del tramo recto encrustada en su mamposteria. Y la torre, sus ventales y arcos con las columnas de parteluz.

Realmente un mundo. Todo un mundo interior que recrear...

Salud y románico
juancar347 ha dicho que…
Hola, Kalma. En efecto, un lugar por descubrir; un pequeño universo en el que se mezclan historia, leyendas, anécdotas y milagros que merecen la pena ser, yo diría que 're-descubiertos' porque forman una parte importante del folklore popular. Un abrazo
juancar347 ha dicho que…
Hola, Syr. Tu recuerdo del lugar puede aportar también datos interesantes. Coincido contigo en que, en su aspecto general, guarda cierto parecido con el entorno de Perdices, Si bien es cierto que la iglesia ha sido bastante remodelada en épocas posteriores a la de su edifición, aún conserva buena parte de aquella época. El interior de la torre es singular; llegar arriba constituye toda una aventura y aún guarda algunos secretos. Es posible que algún día podamos echar un vistazo juntos. Un abrazo
Unknown ha dicho que…
Cómo no vas a decir que es un universo!!! Me has dejado anonadada con la cantidad de recovecos sorprendentes que nos narras y nos muestras. He visto pinturas de varias épocas, artesonados, arquitectura, unos libros del ayuntamiento que debe ser maravilloso poder echarles un vistazo! Y además, tengo la sensación de que ese 23 fuiste de los pocos visitantes que anduvieron por allí... Universo? Sí, y paraíso. Un saludo.
juancar347 ha dicho que…
Hola, Iconos. No te falta razón; que yo sepa, fui el único visitante, aunque también es cierto que se puede decir que fue a mesa puesta. Aún quedaron cosas pendientes, que no se pudieron realizar porque la lluvia y el barro lo impidieron. Pero ya habrá tiempo. Me alegro que te haya gustado. Saludos
Anónimo ha dicho que…
Juancarm esta zona de Soria es la que menos conozco porque aunque no es la mas lejana de donde yo soy, sino que es mas lejana todo el entorno cercano del Moncayo, este atrae mas y cuando he ido siempre me he dirigido directamente hacia el Moncaya y sus alrrededores mas cercanos y mas llamativos y esto queda siempre de paso.
Gracias por acercarnos
Un saludo/Jose Maria
juancar347 ha dicho que…
Hola, José Mª. Ese es el problema precisamente, que muchas veces tendemos a ir hacia aquello que nos resulta más espectacular y no nos detenemos en estos lugares que, aunque pequeños como Peroniel, guardan siglos de Historia y numerosas sorpresas, que merece la pena ir descubriendo. Un abrazo
Javier ha dicho que…
Peroniel, la pena es que como les ha pasado a muchos de los pueblos sorianos se ha quedado casi en el recuerdo, no te puedes imaginar lo que ha cambiado desde aquellos años en los que festejaba con la que ahora es mi mujer, hoy ni el día de la fiesta reune a tantos como vivían entonces.

Un abrazo
juancar347 ha dicho que…
Pues sería una auténtica lástima que se dejara también perder, con toda la Historia y tradición que atesora. Al menos he visto una buena disposición en los vecinos para evitarlo. Un abrazo

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