Vivencias de un Caminante descubriendo la provincia
Visión romántica de un amanecer en el Cañón del Río Lobos
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'No te culpes si, de vez en cuando pierdes el tiempo
con tonterías. Son los pequeños placeres
los que nos dan los grandes estímulos'
[Paulo Coelho: 'Maktub']
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Comentarios
Anónimo ha dicho que…
REALMENTE SON LAS PEQUEÑAS COSAS DE LAVIDA LAS QUE PUEDEN SERVIRNOS DE ESTIMULO Y DARNOS ESA FELICIDAD QUE EL SER HUMANO TANTO ANHELA; PERO PARA ESO HAY QUE SER SSENSIBLES A ESA REALIDAD HERMOSA QUE NOS RODEA Y QQUE A VECES, LAS PRISAS DE LA VIDA Y EL ANSIA DE BIENES MATERIALES, NO NOS DEJA VER... CREO QUE POSEES ESA CAPACIDAD ESPECIAL, PARA CAPTAR LO SENSIBLE, LO HERMOSO Y LO CARISMATICO QUE PUEDE HABER EN TU ENTORNO... ¡¡NO PIERDAS ESA CAPACIDAD TAN ESPECIAL QUE LA VIDA, EL DESTINO O QUIEN SEA, TE HA PROPORCIONADO... NO DEJES DE SER COMO ERES Y PROCURA QUE ESO TE DE TODA LA FELICIDAD DEL MUNDO!!
porque los viajes son importantes, pero el más importante es el que hacemos al interior de nosotros mismos. Madre mia, qué envidia, un amanecer en el río Lobos, cuanto tiempo hace....
Anónimo ha dicho que…
La última vez que vi amanecer el San Bartolo, todavía dejaban acampar en cualquier sitio; pusimos la tienda entre la ermita y el estanque. Había solo dos grupos acampados y la otra tienda estaba como a 500 metros; y por la mañana la ducha era un chapuzón en las aguas heladas del estanque. Y se podía hacer lumbre para asar unas chuletas... No me lo estoy inventando. Era tal que así. Lo juro.
Mi querida anónima amiga Teresona: ¿qué puedo decirte que no sepas ya?. Esa visión interior tú la tienes mucho más desarrollada que yo. Y como te he dicho muchas veces: es una pena que los demás se la pierdan. Tú tampoco dejes de ser como eres. Un abrazo
No todo se basa en su románico de calidad; ni en sus espacios naturales de soberbia belleza, como la Laguna Negra, el entorno de los Picos de Urbión o el Parque Natural del Cañón del Río Lobos; tampoco en sus singulares fiestas tradicionales y sus romerías. Ni siquiera en la variedad micológica de su tierra, que hace las delicias, a día de la fecha, de micólogos y aficionados, que rastrean sus valles y pinares en busca de tan codiciado tesoro. Soria, provincia de contrastes que nunca deja de sorprenderme, es también heredera y depositaria de viejas glorias -y no me refiero a Tiermes, Numancia o Uxama- que incitan a mirar hacia atrás, con un sentimiento de inconfundible nostalgia. Allí, aparcada a un lado del apeadero, la vieja locomotora numerada con el número 'dos mil doscientos sesenta y tres' sueña, desde su merecida jubilación, con el humo ennegrecido que salía de su chimenea y el silbido provocado por el vapor en ebullición que se acumulaba en sus calderas. Segurament
'Las olas negras y tumultuosas del Rhin hacen resonar a veces, según la leyenda, los gritos quejumbrosos de la Lorelei, la roca de ecos inagotables. De ese modo dan rienda suelta a su dolor los guerreros errantes por las tinieblas eternas, en busca del tesoro nunca encontrado, el tesoro del Rhin'. ['El misterio de los grandes tesoros perdidos', Círculo de Amigos de la Historia, 1973] Muhammad ibn Abd-Allah ibn Abu Amir, Al-Mansur, el Victorioso; para la Historia de nuestro país, más conocido como Almanzor. Parece ser, que no hay una auténtica certeza histórica acerca de su lugar de nacimiento, aunque los historiadores tienden a fechar tal acontecimiento, en el año 938. También certifican su óbito de manera más precisa, el día 11 de agosto de 1002, aunque todavía se ignora exactamente el lugar donde éste sucedió, aunque las sospechas recaen en Bordecorex o en Medinaceli. Lo que sí parece rigurosamente cierto, es que resultó mortalmente herido durante la batalla de
'De pronto, sin saber cómo, Nietihw y Sinuhé descubrieron que se hallaban en la plaza de la Lastra, en la recóndita aldea soriana de Sotillo del Rincón, caminando sin prisas hacia la Casa Azul. Un sol radiante hacía brillar dulce y discretamente el bronce de la Diana Cazadora, mientras el caño seguía manando en silencio, como si nada hubiese ocurrido...' [Juan José Benítez, 'La rebelión de Lucifer', Editorial Planeta, 1988] H acía tiempo que tenía deseos de visitar este pequeño pueblecito de Soria, motivado por la curiosidad que me produjo en su momento la lectura de esta conocida novela del periodista de origen navarro, aunque afincado en Bilbao, Juan José Benítez. Feliz por mi anterior experiencia en Tera y con la mente todavía dándole vueltas a los descubrimientos narrados en mi anterior entrada, me esperaba cualquier cosa, salvo que el primer ser viviente con el que me topé en Sotillo, fuera un gato negro que, circunstancialmente, se encontraba tomando el
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CREO QUE POSEES ESA CAPACIDAD ESPECIAL, PARA CAPTAR LO SENSIBLE, LO HERMOSO Y LO CARISMATICO QUE PUEDE HABER EN TU ENTORNO... ¡¡NO PIERDAS ESA CAPACIDAD TAN ESPECIAL QUE LA VIDA, EL DESTINO O QUIEN SEA, TE HA PROPORCIONADO... NO DEJES DE SER COMO ERES Y PROCURA QUE ESO TE DE TODA LA FELICIDAD DEL MUNDO!!
Madre mia, qué envidia, un amanecer en el río Lobos, cuanto tiempo hace....
No me lo estoy inventando. Era tal que así. Lo juro.